Anapo o Anapis (en griego Ἄναπος, Ánapos), en la mitología griega, es un dios fluvial del este de Sicilia.
Como dios río, amado por la náyade Ciane,[1][2][3] se opusieron al rapto de Perséfone por Hades, dios del inframundo. Aún juntando fuerzas entre los dos, citando su amor como ejemplo de relación consensuada, intentando convencer a Hades de que no se llevara a Perséfone por la fuerza,[4] no tuvieron éxito. Hades, furioso, los transformó respectivamente en un arroyo (el Anapo en Sicilia) y en un manantial, cerca de Sortino y de la Necrópolis rupestre de Pantálica.
Es el dios titular del siciliano río Anapo.