El balón prisionero,[1][nota 1] es un juego popular con distintas variantes, practicado normalmente en clases de educación física. Se dividen en dos equipos y una cancha que se divide en dos. Se ubican los equipos, uno a cada lado de la cancha. De cada equipo habrá un jugador (delegado) situado en el campo contrario por fuera de los límites del rectángulo. Con 6 pelotas en juego los jugadores de uno y otro equipo tratarán de eliminar a los jugadores contrarios del otro equipo arrojando la pelota para que esta los golpee sin ningún pique previo y caiga al suelo. Los jugadores «quemados» o «muertos» irán al área donde se encuentra el delegado y podrán «quemar»/«matar» a los jugadores contrarios si la pelota llega hasta sus manos y con esa pelota le dan a alguien del equipo contrario.
En este juego existen variantes:
Una, en donde cada vez que eliminan a alguien del equipo contrario un compañero del mismo equipo puede entrar.
Otra, donde cada vez que eliminan a alguien no puede hacer nada hasta que tira a los del equipo contrario.
El campo de juego es rectangular, con medidas de 18×9 metros, dividido por la mitad con una raya trazada en el suelo para separar el terreno de cada equipo. Ningún jugador puede traspasar esa raya divisoria y puede jugarse en cualquier tipo de terreno siempre y cuando esté libre de obstáculos.
Eliminar a todos los jugadores contrarios. Para ello, basta con golpearles con la pelota en cualquier parte del cuerpo (pies, manos, cabeza si está agachado...) sin que lleguen a cogerla antes de que toque el suelo. El jugador golpeado abandona el campo de juego y pasa a situarse fuera, detrás del campo enemigo. Allí tiene la posibilidad de atrapar la pelota si esta traspasa el campo para poder quemar a los del equipo contrario o devolverla a su equipo, El jugador del equipo que empieza deberá lanzar la pelota hacia uno de los contrincantes, si el rival la coge sin que caiga al suelo la pelota pasara a ser de su equipo y el que la lanzó se convertirá en su prisionero. Pero si no consigue cogerla y la pelota le golpea este será eliminado.
Se juega como el delegado tradicional, en vez de jugarse en dos campos, se juega en cuatro campos, cuatro grupos de jugadores. Cada grupo compite contra los otros tres.[4]
Semejante al delegado tradicional, pero cada grupo está integrado por mujeres y varones. Cuando comienza el juego, el encargado define a quién vale quemar, si vale quemar varones, las mujeres los defienden y no pueden ser quemadas; si vale quemar mujeres, los varones las defienden y no pueden ser quemados. Alternar rápidamente a quién se puede quemar.[5]
Semejante al delegado tradicional, pero en el medio de cada campo se instala una «fortaleza» (una colchoneta, cajón o mesa donde los jugadores puedan refugiarse). Dependiendo de las normas aplicadas al juego, y esencialmente si se está usando una colchoneta, esta se puede utilizar para desviar un impacto del equipo contrario.[6]
↑También conocido como balón tiro,[1] cementerio,[1] mate,[1] mato,[1] brilé,[1] matar,[2] cuarto quemo, quemado, bombardeo, quema, matasapo, campo quemado, campos quemados, ponchado, macho parado, delegado, campo muerto, balucón, dodgeball (a veces también conocido en ciertas partes de España como datchball), matagente[3] el matar o balón muerto