Los bous al carrer (en castellanotoros en la calle), también llamado correbous, es una fiesta taurina popular típica, donde se sueltan, conducen, torean o recortan las reses bravas sin que exista lidia de las mismas.
Toros cerriles: se entiende por toros cerriles aquellos toros que no han sido toreados, lidiados o corridos en ningún festejo taurino tradicional o en otros espectáculos taurinos.[1][2]
Toro de cuerda o ensogado: se entiende por toro ensogado o de cuerda el festejo taurino de carácter popular en el que la res es conducida por las calles de la localidad mediante la utilización de sogas o cuerdas sujetas al astado a través de aperos o badanas, sin que, necesariamente, la zona autorizada para su recorrido se halle cerrada.[3][4]
Encierros: se entiende por encierros el traslado de las reses desde un punto de comienzo a otro de finalización. Esta modalidad se puede hacer con o sin caballos.[5][6]
Toro embolado: en esta modalidad, al toro se le coloca una estructura metálica en cada uno de sus cuernos, con dos bolas de estopa encendidas en la parte superior, y se le suelta en una plaza o en calles cerradas.[7][8]
Toro de corro: se entiende por toros de corro aquellos toros que han sido toreados, lidiados o corridos varias veces.[9]
Concurso de recortes: el concurso de recortes es una modalidad en que los recortadores se enfrentan al toro realizando todo tipo de quiebros reversos, contoneos y saltos sobre el mismo, con la finalidad de engañar al animal al pasar junto a él.[10]
En la Comunidad Valenciana, los bous al carrer, en cualquiera de sus modalidades, son un festejo muy arraigado, con más de 7000 espectáculos al año y 300 municipios que solicitan celebrarlos.[14]
Por ello, la Generalidad cuenta con una regulación específica para estos acontecimientos populares donde se establecen las condiciones de celebración y el desarrollo de estos.
Actualmente, esta regulación se encuentra en el Decreto 31/2015, de 6 de marzo del Consejo, por el que se aprueba el Reglamento de festejos taurinos tradicionales en la Comunidad Valenciana.[15] Esta norma viene a sustituir el Decreto 24/2007, de 23 de febrero del Consejo, por el que se aprueba el Reglamento de festejos taurinos tradicionales en la Comunidad Valenciana;[16] norma que en su momento fue desarrollada por la Orden de 1 de septiembre de 2005[17] y posteriormente modificada por el decreto 120/2010, de 27 de agosto.[18]
En Cataluña los primeros indicios de este tipo de espectáculo tradicional se encuentran en el siglo XVII, aunque su proliferación en distintos municipios se produjo durante los siglos XVIII y XIX.[19]
Algunas de las modalidades más populares en dicha comunidad autónoma son el toro ensogado (bou capllaçat), los toros en la plaza (bous a la plaça) o el toro embolado (bou embolat).[20]
Como en la Comunidad Valenciana, Cataluña cuenta con legislación específica que regula las condiciones en que se desarrollan estos festejos.
Actualmente, la regulación corresponde a la Ley 34/2010, de 1 de octubre, de regulación de las fiestas tradicionales con toros y en el Decreto 156/2013, de 4 de abril, por el que se aprueba el reglamento de desarrollo de la ley previamente mencionada.[21]