Se conoce como ciclo geográfico, ciclo de erosión o ciclo de Davis al conjunto de los cambios sufridos por el relieve de una región desde que se eleva sobre el nivel del mar hasta que su relieve queda reducido al nivel del mar por la acción de los agentes del modelado terrestre.
La historia del ciclo geográfico se remonta a finales del siglo XIX cuando el geógrafo estadounidense William Morris Davis formuló una teoría con la que quiso explicar la evolución del relieve terrestre, a esta teoría la llamó «ciclo geográfico».[1] El ciclo geográfico, proponía que el relieve terrestre era el resultado de «un proceso erosivo de carácter progresivo y secuencial»[2],con el ciclo geográfico pretendía interpretar los accidentes geográficos a partir de 3 variables: estructura, proceso y tiempo.[3] Con el ciclo geográfico pretendía además reemplazar las antiguas teorías catastrofistas de siglos anteriores en donde se explicaba la creación de las geoformas era producto de eventos repentinos y violentos.
En 1913, Davis escribió que la geología «es principalmente una ciencia explicativa en la que el gran cuerpo de sus proposiciones rebasa ampliamente el campo de los hechos observables en el terreno, que pueda ser alcanzado sólo por medio, de un proceso mental especulativo»; proponía, por ello, que en la preparación de los geólogos se diera una más sistemática y completa instrucción «en la parte no observacional de la geología».[4]
Davis clasificó las secuencias formadoras de geoformas en cinco fases o estadios[5] que son:
El ciclo geográfico nunca se produce con precisión, pues ninguna región se mantiene estable por un período lo suficientemente largo para que su relieve quede totalmente destruido. Muchas veces el ascenso o el descenso de la litosfera, producido por fuerzas geológicas como el diastrofismo o la orogénesis, interrumpen el ciclo geográfico.
El ciclo geográfico se puede ver acelerado, desacelerado e incluso aparentemente interrumpido por los cambios climáticos que pueda sufrir una región, hecho que la paleoclimatología ya ha comprobado su existencia en épocas pasadas. Es el caso de las glaciaciones del Pleistoceno, por ejemplo, que modificaron la intensidad de la erosión al cambiar la acción del agua por la del hielo, con lo que el perfil transversal de los valles pasó de tener la forma de la letra V a la de la U, y por el descenso generalizado del nivel de base al bajar el nivel del mar.
Las características del ciclo geográfico en las distintas regiones varían de acuerdo con el tipo de clima que posea actualmente. En las regiones de clima húmedo el ciclo geográfico avanza con mayor intensidad que en las regiones de clima seco.
El ciclo geográfico se presenta con mayor precisión en las regiones húmedas, donde predomina la acción erosiva de los ríos.