El Codex Claromontanus es un manuscrito realizado en griego uncial (es decir, empleando mayúsculas) y latín, fechado aproximadamente en el siglo VI. Originalmente contenía todo el texto griego y latino de las cartas de san Pablo, incluida la Epístola a los hebreos, en 533 folios de pergamino, de formato 24.5x19.5 cm. Toma su nombre de la ciudad francesa de Clermont-Ferrand, donde fue encontrado por el estudioso calvinista Teodoro de Beza.
El códice contiene también el Catalogus Claromontanus, compuesto en Occidente en el siglo IV, que enumera los libros considerados canónicos e indica el número de líneas que tenía cada obra.[1] Además de los libros que actualmente son considerados canónicos, la lista comprende también algunos apócrifos como la Tercera epístola de Pablo a los corintios, los Hechos de Pablo, el Apocalipsis de Pedro. Asimismo, conserva textos de otros escritos como la Carta de Bernabé y el Pastor de Hermas.
El texto griego de este códice es una representación del Tipo textual occidental. Kurt Aland lo ubicó en la Categoría II.[2] Actualmente se conserva en la Bibliothèque nationale de France (Gr. 107).[2]