La Conferencia de Bandung, celebrada entre el 18 de abril y el 24 de abril de 1955 en Bandung, Indonesia, fue una reunión de Estados asiáticos y africanos, la mayoría de los cuales acababan de acceder a la independencia. Fue organizada por los independentistas: Gamal Abdel Nasser, presidente de Egipto, Jawaharlal Nehru, de India, y Sukarno, jefe de Estado de Indonesia, además de los líderes de Pakistán, Birmania y Ceilán (actual Sri Lanka). Estos últimos cinco países asiáticos invitaron a otros veinticinco a participar en la conferencia.
El objetivo declarado de la conferencia era el promover la cooperación económica y cultural afro-asiática, en oposición al colonialismo y el neocolonialismo de las antiguas metrópolis y los Estados Unidos.[1] La conferencia fue un paso hacia la constitución del Movimiento de Países No Alineados (MPNA). Ambas iniciativas se desarrollaron en paralelo durante la década del 60, inclusive llegando a confrontarse la una con la otra previo a la 2.a conferencia del MPNA de 1964 en Cairo.
Para celebrar el aniversario número 50 de la Conferencia, los jefes de Estado y de Gobierno de países asiáticos y africanos se reunieron en una Encuentro Asia-África entre el 20 y el 24 de abril de 2005 en Bandung y Yakarta. Algunas sesiones de la nueva conferencia tuvieron lugar en el Gedung Merdeka (Edificio de la Independencia), sitio de la conferencia original. Esta nueva reunión concluyó con el establecimiento de una Nueva Alianza Estratégica Afro-Asiática.
Se acordaron una serie de principios que debían guiar las relaciones internacionales de los integrantes del Movimiento de Países No Alineados, fundado en su espíritu en esta conferencia:
La conferencia se organizó en tres comisiones de trabajo: una política, una económica y una cultural. El comunicado final elaborado por los participantes recogió las conclusiones de la conferencia sobre cooperación económica, cooperación cultural, derechos del hombre, autodeterminación, problemas de los pueblos dependientes, la promoción de la paz y la cooperación mundiales con los principios de la coexistencia pacífica, así como una condena de a la llamada discriminación racial.
Entre los países y colonias participantes se encontraron:[2]