Enterolobium cyclocarpum | ||
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Taxonomía | ||
Reino: | Plantae | |
División: | Fanerógama Magnoliophyta | |
Clase: | Magnoliopsida | |
Orden: | Fabales | |
Familia: | Fabaceae (leguminosa) | |
Subfamilia: | Mimosoideae | |
Tribu: | Ingeae | |
Género: | Enterolobium | |
Especie: |
Enterolobium cyclocarpum (Jacq.) Griseb. 1860 | |
Enterolobium cyclocarpum es una especie de árbol del orden Fabales, familia Fabaceae. Es un árbol nativo de América, de regiones tropicales y templadas cálidas. Constituye en una de las dos especies conocidas como "oreja de elefante" en varios países americanos, huanacaxtle, parota, pich, oreja de elefante en México, conacaste en El Salvador, Guatemala, guanacaste en Honduras, Nicaragua y Costa Rica, corotú en Panamá y otras partes, orejero, piñón de oreja o caracaro en Colombia y carocaro en Venezuela. Es una especie maderable y a veces se usa como árbol de ornato. Es el árbol nacional de Costa Rica desde el 31 de agosto de 1959, donde se le identifica además como símbolo de la provincia de Guanacaste.
El nombre común de «árbol de guanacaste» es una denominación proveniente de dos palabras del idioma náhuatl: quauh, árbol y nacastl, oreja, refiriéndose a la forma de su fruto, que recuerda una oreja humana.
El nombre del género al que pertenece, Enterolobium, lo describió Carl Friedrich Philipp von Martius.
El árbol se conoce por diversos nombres comunes en varios países. En el caso particular de México es donde hay más abundancia de apelativos según la región: agucastle, ahuacashle, bisayaga (zapoteco istmeño), cuanacaztle, nacashe, nacaste, nacastillo, nacastle, nacaztle (Oax.); cascabel, cascabel sonaja (Tamps.); cuanacaztli, cuaunacaztli (l. náhuatl); juana costa (nombre comercial); nacaxtle, orejón (Ver., S.L.P.); pich (Yuc.); piche (Tab.); cuytátsuic (l. popoluca, Ver); guanacaste, huanacaxtle, huienacaztle, huinacaxtle, huinecaxtli (Sin.); lash-matz-zi (l. chontal, Oax.); ma-ta-cua-tze, mo-cua-dzi. mo-ñi-no (l. chinanteca, Oax.); shma-dzi (l.chontal, Oax.); nacascuahuitl; parota (Mich., Gro., Jal., Col.); tutaján (l. mixteca, Oax.); pich (en la península de Yucatán); ya-chibe (l. zapoteca, Oax.) y tiyuhu (l. huasteca, S.L.P.).[1]
En otros países de la región: corotú (Panamá); guanacaste (España, Guatemala, Honduras, Nicaragua, Costa Rica); guanacaste blanco, jarina o curú (Costa Rica); guanacaste de oreja o tuburus (Nicaragua); guanacaste negro (Honduras, Nicaragua); pit (Guatemala); conacaste (España, Guatemala, el Salvador) y tubroos (Belice). En España, donde es una especie introducida, también se le conoce como conacaste negro y caro hembra.[2]
Es un árbol muy alto y muy ancho que se relaciona con la presencia de un río debajo de sus grandes troncos, por lo que a menudo tiene la apariencia de un samán, del que se diferencia por ser más alto y abierto, es decir, menos achaparrado y también por sus frutos. El fruto en legumbre tiene forma de círculo helicoidal, de modo que el ápice toca casi con la base.[3] El tronco puede alcanzar 16 dm de ancho, y hay ejemplares de 4 m de diámetro. Alcanza alturas de 16 a 28 m con una gran expansión del ramaje. Las hojas recuerdan al tamarindo.
Árbol grande y llamativo, caducifolio, de 20 a 30 m (hasta 45 m) de altura, con un diámetro a la altura del pecho hasta de 3 m.
Copa hemisférica. El follaje es abundante, dando a la amplia copa una forma más ancha que alta. Libre de competencia por la luz puede alcanzar grandes diámetros.
Hojas bipinnadas con cuatro a quince pares de pinnas opuestas, miden de 15 a 40 cm de largo; folíolos numerosos (quince a treinta pares por pinna) de color verde brillante que se pliegan durante la noche.
Tronco derecho y a veces con pequeños contrafuertes en la base. Ramas ascendentes.
Externa lisa a granulosa y a veces ligeramente fisurada, gris clara a gris pardusca, con abundantes lenticelas alargadas, suberificadas, dispuestas longitudinalmente. "Interna" de color crema rosado, granulosa, con exudado pegajoso y dulzón. Grosor: 2 a 3 cm.
En pequeñas cabezuleas pedunculadas axilares, de 1,5 a 2 cm de diámetro, sobre pedúnculos de 1,5 a 3,5 cm de largo. Flores actinomórficas, cáliz verde y tubular; corola verde clara, de 5 a 6 mm de largo.
Fruto característico de la especie. Consiste en una vaina circular indehiscente, de 7 a 15 cm de diámetro, aplanada y enroscada, leñosa, moreno oscura, brillante, de sabor dulce. Contiene de diez a quince semillas.
Semillas grandes, ovoides y aplanadas, de 2,3 por 1,5 cm, morenas y brillantes con una línea pálida con la forma del contorno de la semilla, rodeadas por una pulpa esponjosa y fibrosa de olor y sabor dulce. Presentan una testa extremadamente dura que impide la germinación hasta que una modificación estructural permita la hidratación del embrión.
Sistema radical extenso y profundo.
2n = 26.[1]
Las semillas de Enterolobium cyclocarpum son fáciles de hacer germinar en tres a cuatro semanas, y de una a dos con asistencia. Para apurar el proceso de germinación, se las puede sumergir en agua hirviendo durante treinta a cuarenta y cinco segundos e inmediatamente se sacan y se sumergen en agua fría. Esto afloja la cubierta. Y se planta inmediatamente a 2 cm debajo de un suelo bien drenado / arenoso, y agua una vez al día hasta que la yema apical llega a 10 cm de altura. La germinación también puede favorecerse con un lijado suave con una pequeña lima, cuidando de no dañar el embrión. Así pues, una procedimiento alternativo que permite germinar las semillas también en una semana, es lijar ligeramente la parte lateral de la semilla (la parte clara) con cuidado. Posteriormente sumergir la semilla en agua hirviendo por unos segundos. El cambio de temperatura fracturará la semilla de manera microscópica y permitirá que la humedad alcance más fácilmente al embrión. Una opción menos recomendada es golpear la semilla con un martillo para fracturarla, esto puede provocar que el embrión se rompa interiormente y no germine de manera sana.
Originaria de América tropical. Se extiende desde el oeste y sur de México a través de Centroamérica hasta el norte de Sudamérica (Venezuela y Brasil). También se le encuentra en Jamaica, Cuba, Trinidad y Guyana. Ha sido introducida a otras regiones tropicales. Se desarrolla en regiones costeras y a lo largo de ríos y arroyos. Su hábitat propicio es de baja elevación (por debajo de los 500 m). Presenta su mejor desarrollo en los suelos conocidos como vertisol pélico y vertisol gleyco (FAO). Suelos: arenoso-arcilloso, arenoso, negro.([1])
En los estados de México, Sonora y Veracruz, se emplea esta planta en padecimientos respiratorios como resfríos y bronquitis, además de utilizarse como antigripal. Los remedios se preparan con diversas partes de la planta como los frutos, la goma y la corteza, (en jarabe) así como el extracto de la planta.
También se usa contra las hemorroides, el glico sanguíneo, la diarrea, como depurativo y para la buena digestión.
En el siglo XVI, Martín de la Cruz le adjudica los siguientes usuarios: ”el que administra la República” ”el viajero”. El Códice Florentino reporta: ”tomada para el que escupe sangre y para los que tienen cerrada la cámara” (estreñimiento). Francisco Hernández de Toledo indica: ”se prepara con él una tinta muy buena y se agrega el cacaóatl para tonificar las entrañas”. A finales del mismo siglo, Juan de Cárdenas menciona: ”Agregada al chocolate da buen olor, fragancia y suavidad y como toda medicina aromática de su naturaleza sea cordial, esta bebida refuerza y conforta la virtud vital ayudando a engendrar espíritu de vida. Tiene partes estéticas y confortativas, mediante todo lo cual conforta el hígado, ayuda a la digestión del estómago, destirpando toda ventosidad y malos humores que en sí tenga el estómago y esto también hace con ciertas partes sutiles que tiene, mediante las cuales provoca el menstruo y la orina”.
Más información la encontramos hasta el siglo XX, cuando Maximino Martínez la cita como: anticatarral, contra la bronquitis y hemorroides.
En la corteza del tallo se han detectado los triterpenos ácido betulínico y veracruzol; el ácido machaerínico en la planta completa, y en la pulpa del fruto, lactona.
Se comprobó actividad antibacteriana en un extracto metanólico del tallo de la planta frente a las especies Escherichia coli y Staphylococcus aureus.[4]
Enterolobium cyclocarpum fue descrita por (Jacq.) Griseb. y publicado en Flora of the British West Indian Islands 226. 1860.[5]
El árbol de guanacaste aparece en el logotipo del Instituto Nacional de Seguros, aseguradora estatal de Costa Rica.
A partir del año 2011, al árbol de guanacaste aparece retratado en el reverso de los billetes de ₡1.000 de Costa Rica, junto con otro símbolo nacional de este país centroamericano, el Venado Cola Blanca.