F-19 es el nombre de un supuesto avión de combate estadounidense invisible al radar, ya que nunca fue oficialmente reconocida su existencia ni hay pruebas de ella. La supuesta existencia del F-19 ha sido el origen de muchas especulaciones acerca de si el avión existió realmente o si solo fue una maniobra de distracción acerca de la existencia del F-117.
Desde que en 1962 el Departamento de Defensa recurrió a la unificación de sistema de numeración, los aviones de combate americanos han seguido un sistema de numeración consecutivo. La numeración comenzó en los cazas con el F-1 Fury. El número F-13 se dejó libre debido a la superstición sobre dicho número, aunque había existido un avión así denominado, en concreto una variante de reconocimiento del B-29. Después del F/A-18 Hornet el siguiente modelo de caza fue el F-20 Tigershark. Aunque la USAF propuso F-19 para el siguiente modelo, Northrop solicitó que se designara "F-20" (lo cual fue finalmente aprobado en 1982).[cita requerida] La verdad en este salto de numeración que Northrop presionó para evitar un número impar, dado que era el empleado por la URSS para denominar a los cazas Mig. Por lo tanto el Pentágono acabó cediendo y dando la denominación "F-20" al proyecto de Northrop, aunque tanto antes como después Northrop emplearía números impares: F-17 y F-23.[1][2][3]
Durante los años 1980, se pensaba que el "F-19" era la denominación oficial de lo que luego sería revelado como el avión stealth cuya existencia era un secreto a voces en la industria aeronáutica de Estados Unidos. Curiosamente, a pesar de tratarse de un avión de ataque, su denominación oficial fue F-117, empleando la convención creada para los Mig operados por la USAF.[4][5]
Intencionadamente o no, eran frecuentes los rumores acerca de que el avión denominado F-19 existía y era en realidad un proyecto de alto secreto (los denominados Black en la jerga americana) diferente al F-117, lo que suponía que no fuera revelado al público.[1] Se cree que parte de esta historia responde a una operación deliberada de desinformación por parte de Estados Unidos para confundir a la KGB e intentar distraer su atención de los verdaderos proyectos Stealth, haciendo más difícil de interpretar la información que pudiera llegarles.[1][6]
Algunos defienden que el avión realmente existió y que responde a un concurso secreto convocado por la DARPA para un avión interceptor invisible al radar que hiciera frente a los bombarderos Tupolev Tu-160 y a su posible escolta de cazas Su-27.[7] Sin embargo este programa existió realmente, fue el Advanced Tactical Fighter que acabó en el caza F-22, no en el F-19. Según estas fuentes el F-19 habría sido el ganador del concurso y varios prototipos se habrían construido y evaluado en Groom Lake siendo el programa finalmente abandonado por el final de la Guerra Fría.[8][9] Según esta teoría podría tratarse de un avión diseñado tanto por Lockheed como por Northrop, aunque la realidad indica que el F-19 nunca existió.[10][11][12][13]
Existe una discusión similar acerca de la existencia del caza F-24. En este caso la discusión gira alrededor del ATF (Advanced Tactical Fighter), el prototipo X-32 y el programa F/A-XX.[14]