Los Guardianes de Escocia fueron los jefes de Estado de facto de Escocia[1] durante los interregnos de 1290-1292 y 1296-1306.
En los siglos XIII y XIV, durante los varios períodos de vacío del trono escocés —por minoría de edad, prisión, falta de descendencia directa del monarca, etc.—, diversos regentes, llamados los Guardianes de Escocia, bien individualmente o bien colectivamente, dirigieron la política escocesa.
Guardianes de Escocia durante el Primer Interregno (1290–1292)
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En una carta escrita en antiguo francés del Parlamento de Escocia reunida en 1290 en Birgham que confirma el Tratado de Salisbury, los guardianes de Escocia son listados como:[3]
"... Guillaume de Seint Andreu et Robert de Glasgu evesques, Johan Comyn et James Seneschal de Escoce, gardeins du reaume de Escoce..."
Que traducido es: "William [Fraser], Obispo de St Andrews, y Robert [Wishart], Obispo de Glasgow, John Comyn y James el administrador de Escocia, guardianes del Reino de Escocia".
Guardianes de Escocia durante el Segundo Interregno (1296–1306)
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Guardianes durante la minoría de edad de David II
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- Sir Thomas Randolph, I Conde de Moray (1329-1332), nombrado por el Acta de 1318.
- Donald, Conde de Mar, (1332, durante diez días)
- Sir Andrew Moray de Bothwell (1332-1333) hasta su captura por los ingleses
- Sir Archibald Douglas (1333, durante tres meses)
- Sir Andrew Moray de Bothwell por segunda vez, (1335-1338)
- Roberto, sobrino de David y futuro rey como Roberto II. Roberto fue guardíán en cuatro ocasiones, a veces acompañado y las dos últimas solo durante los once años de prisión en Inglaterra tras la Batalla de Neville's Cross (1345-1357). Aprovechó esos años para construir una base de poder sólida en el país, especialmente en el norte del Forth.
Guardianes durante el reinado de Roberto II
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Actuaron durante la enfermedad de Roberto II.
- Mack, James Logan (1926). The Border Line. Pub. Oliver & Boyd. pp. 317–322.
- McNaught, Duncan (1912). Kilmaurs Parish and Burgh. Pub. A.Gardner. p. 9.