Herberts Cukurs | ||
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Retrato de Herberts Cukurs. | ||
Información personal | ||
Apodo |
El carnicero de Letonia El verdugo de Riga | |
Nacimiento |
17 de mayo de 1900 Liepāja (Letonia) | |
Fallecimiento |
24 de febrero de 1965 (64 años) Shangrilá, (Uruguay) | |
Causa de muerte | Ejecución extrajudicial | |
Nacionalidad | letona | |
Información profesional | ||
Ocupación | Aviador, capitán de la Fuerza Aérea Letona, ingeniero aeronáutico, periodista y escritor. Auxiliar de la policía Letona durante la Segunda Guerra Mundial. | |
Distinciones | ||
Herberts Cukurs (Liepāja, Letonia; 17 de mayo de 1900 – Shangrilá, Uruguay; 24 de febrero de 1965) fue un aviador, capitán de la Fuerza Aérea Letona, ingeniero aeronáutico y periodista acusado de nazismo[1] y huido a Brasil tras la Segunda Guerra Mundial. Según numerosos testimonios estuvo implicado en el Holocausto en Letonia durante la Segunda Guerra Mundial, aunque ciertos nacionalistas letones niegan su culpabilidad.[2]
Cukurs era natural de Liepāja, a unos 170 kilómetros al suroeste de Riga, la capital letona. Se hizo famoso mundialmente por los raids (vuelos de larga distancia) que realizó en los años 30, cuando escribió su nombre y el de su país en la historia de la aviación mundial, lo que le hizo ser conocido como «el Lindbergh báltico».[3]
Al parecer, Cukurs integró junto al Mayor Victor Arajs como miembro de la policía auxiliar letona, los grupos antisemitas que apoyaron al llamado "Kommando Arajs" y el mismo reconocería en los años 50 su implicación en el nazismo.[6][7][8]
Después de la guerra, testigos que sobrevivieron informaron que Cukurs había estado presente durante la evacuación del Gueto.
Después de la guerra, Cukurs emigró a Brasil a través de Francia, y allí estableció en la ciudad de São Paulo un negocio de vuelos panorámicos.
Herbert Cukurs fue identificado por miembros del Mosad en Brasil y, con la falsa intención de montar un negocio en Uruguay,[9] los ejecutores estuvieron por varios días antes de la muerte en un chalet "casa de veraneo" que se alquilaba por temporada en donde se ejecutó a Cukurs localizada en la calle Colombia, Shangrilá, en el departamento de Canelones, a unos 18 kilómetros de Montevideo. Viajaban en escarabajos del año alquilados y hablaban español con un ligero acento difícil de definir. No llamaban la atención porque era un balneario en el cual la población del lugar estaban acostumbrados a turistas. Le llevaron a ese país y el 23 de febrero de 1965 en ese sitio lo asesinaron dejándolo dentro de un baúl en dicha casa, dejando una nota que decía "Aquellos que nunca olvidan". El escritor uruguayo Fernando Butazzoni estudió el caso durante varios años y en 2020 publicó la novela Los que nunca olvidarán, en la que revela los nombres de los colaboradores en Montevideo del comando encargado de su asesinato. Su caso es el único, además del de Adolf Eichmann, que ha sido reivindicado por el Mossad. [10]
Las acusaciones sobre la participación de Cukurs en las atrocidades cometidas durante la Segunda Guerra Mundial le hicieron ganarse el apodo de "el verdugo de Riga" entre los supervivientes del Holocausto.[9]
En la actualidad, en Letonia, parte de la opinión pública está a favor de la exoneración de culpa de Cukurs.[2] Por ejemplo, hay una exhibición en Riga en honor del héroe nacional Herberts Cukurs, en la que su actuación en el Comando Arajs es considerada inocente.[2]