Las infecciones respiratorias agudas (IRA) son padecimientos infecciosos de las vías respiratorias con evolución menor a 15 días y en ocasiones se convierten en neumonía. Las infecciones respiratorias agudas constituyen un importante problema de salud pública, pues resultan con la mortalidad más alta en el mundo.
La neumonía es la principal complicación de las IRA, responsable de un número significativo de muertes.
En los menores de 5 años, el 95% de los casos de IRA son de origen viral, a las complicaciones otitis media y neumonía se agrega la etiología bacteriana. Los agentes causales en las entidades clínicas más frecuentes son:
Debido a la elevada frecuencia de las IRA y al número de episodios mal diagnosticados y tratados es necesario unificar los criterios que faciliten su manejo.
Probables casos de IRA por país, del 1 de noviembre 2002 al 31 de julio 2003.
(*) Figuras para China excluye las Regiones Administrativas (Macau SAR, Hong Kong SAR) reportadas separadamente por WHO.
(**) Desde el 11 de julio de 2003, 325 casos de taiwaneses se han 'descartados'. La información de Lab. fue insuficiente o incompleta para 135 casos; y 101 de esos pacientes fallecieron.
Si hay otorrea: limpieza del conducto auditivo externo con mechas de gasa o tela absorbente, tres veces al día. No aplicar gotas óticas.
Control del dolor y el malestar general, con: acetaminofen 60 mg/kg/día por vía oral, divididos en cuatro a seis tomas. No usar ácido-acetil-salicílico o vasoconstrictores nasales
Control de la temperatura con medios físicos cuando es menor de 38 °C.
No aplicar supositorios para la fiebre, en menores de un año.
No utilizar antitusivos o antihistamínicos.
Si existen factores de mal pronóstico, revalorar en 48 h.
Instruir a la madre/padre en el reconocimiento de los signos de alarma.
Revisar el esquema de Vacunación del paciente y aplicar las dosis faltantes.
Evaluar el estado nutricional, registrar peso y talla, Cartilla Nacional de Vacunación.
Antibióticos: pacientes con rinofaringitis, faringitis congestiva, laringitis y bronquitis (no prescribir antibióticos ya que son de origen viral)
Pacientes con faringitis purulenta: administrar Penicilina benzatina combinada, para mayores de 30 kg administrar 1.200.000 UI, y en menores de 30 kg 600.000 UI I.M. en dosis única
Otitis media aguda y sinusitis: administrar trimetoprim con sulfametoxasol 8/40 mg/kg/día V.O. en 2 dosis (cada doce horas por siete días o amoxicilina 40 mg/kg/día V.O. en 3 dosis (cada 8 horas) por 10 a 14 días.
Revalorar en 24 h, o antes si se agrava.
El tratamiento de infecciones respiratorias agudas superiores con antibióticos, no previene la neumonía en los niños.
Tratamiento de neumonía leve, sin factores de mal pronóstico
Tratamiento ambulatorio (no hospitalizar).
Antibiótico: trimetoprim con sulfametoxasol 8/40 mg/kg/día, dividido en 2 tomas, cada 12 h, 7 días V.O. o bencil penicilina procainíca 400 000 UI, cada 24 h, por 7 días. I.M
Incrementar ingesta de líquidos.
Alimentación habitual, en pequeñas fracciones, más veces al día.
Control de la temperatura con medios físicos cuando es menor de 38 °C. Se administrará acetaminofén 60 mg/kg/día V.O. dividido cada 6 horas sin pasar de 5 dosis al día cuando la temperatura es mayor de 38 °C.
En caso de sibilancias: salbutamol jarabe 0,2-0,3 mg/kg/día en tres tomas, V.O. En el menor de un año valorar la respuesta en una a dos horas. Si es positiva, continuar con salbutamol; si es negativa, suspender. En mayores de un año continuar.
Educación a la madre y padre para que sea capaz de reconocer signos de alarma.Si identifica alguno de los signos indicarle que acuda de inmediato a la unidad de salud.
Revalorar en 24 horas, o antes si se agrava.
El uso indiscriminado e indebido de antibióticos, favorece resistencia bacteriana y mayor gasto económico.
Tratamiento de neumonía grave o leve, con factores de mal pronóstico
Envío inmediato al hospital más cercano, donde se instalará el tratamiento adecuado.
Traslado con oxígeno si es necesario (4 a 6 litros por minuto).