Las normas técnicas (estándares, del inglés standard) son documentos técnicos emitidos por organismos de normalización, que establecen requisitos, condiciones de ensayo, características u orientaciones sobre productos, procesos de fabricación o de gestión, aspectos ambientales, etc. Puede incluir términos y definiciones; clasificación de componentes; procedimientos, especificación de las dimensiones, materiales, características técnicas o las prestaciones; aspectos relacionados con la calidad de los productos, servicios o las organizaciones; métodos de ensayo; etc. En la Ley 21/1992 de Industria[1] de España se define del modo siguiente:
La especificación técnica de aplicación repetitiva o continuada cuya observancia no es obligatoria, establecida con participación de todas las partes interesadas, que aprueba un Organismo reconocido, a nivel nacional o internacional, por su actividad normativa.
Contienen especificaciones técnicas de aplicación voluntaria, en contraposición con los requisitos establecidos en leyes o reglamentos publicados por las Administraciones Públicas, que pueden ser obligatorios para determinados fines o situaciones. No obstante, en ocasiones la administración emplea el término norma para hacer referencia a sus publicaciones, aunque no se correspondería en ese caso con el concepto de este artículo. Como ejemplo, la Norma 3.1-IC Trazado de Carreteras[2] de España.
Las normas técnicas publicadas por organismos de normalización tienen las siguientes características:
Las normas ofrecen un lenguaje de punto común de comunicación entre las empresas, la administración pública, los usuarios y consumidores. Las normas establecen un equilibrio socioeconómico entre los distintos agentes que participan en las transacciones comerciales, base de cualquier economía de mercado, y son un patrón necesario de confianza entre cliente y proveedor.
Los países editan sus normas nacionales, que pueden ser adopción de otras internacionales o regionales. Como ejemplo, en España se publican como Normas UNE.
Los países suelen tener uno o varios organismos de normalización reconocidos, en función de la temática. A continuación, algunos ejemplos:
A nivel internacional o regional, existen varios organismos de normalización, formados generalmente por los organismos nacionales. A nivel internacional:
A nivel regional: