No inventado aquí (Not invented here, NIH ) es la tendencia a evitar el uso o la compra de productos, investigaciones, estándares o conocimientos de fuentes externas. Generalmente es adoptado por culturas sociales, corporativas o institucionales. La investigación muestra un fuerte sesgo en contra de las ideas externas.[1]
Las razones para no querer utilizar el trabajo de otros son variadas, pero pueden incluir el deseo de apoyar una economía local en lugar de dar beneficios a un titular de licencia o patente extranjero, miedo a la infracción de patente, falta de comprensión del trabajo extranjero, falta de voluntad para reconocer o valorar el trabajo de terceras partes, los celos, la perseverancia de creencias o formar parte de una guerra territorial más amplia.[2] Como fenómeno social, esta tendencia puede manifestarse como una falta de voluntad para adoptar una idea o producto porque se origina en otra cultura, una forma de tribalismo .[3]
El término se usa típicamente en un sentido peyorativo. La predisposición opuesta a veces se denomina "orgullosamente encontrado en otro lugar" (proudly found elsewhere, PFE)[4] o "inventado en otro lugar".
En programación, el "síndrome NIH" se refiere a la creencia de que los desarrollos internos son intrínsecamente más adecuados, más seguros, más controlados, más rápidos de desarrollar e incurren en un costo total menor (incluido el costo de mantenimiento) que las implementaciones ya existentes.[cita requerida]
En algunos casos, software ya existente con la misma funcionalidad se vuelve a implementar solo para permitir el uso de una licencia de software diferente. Un método para hacerlo es el diseño de salas blancas .