Una república autónoma es una división administrativa de un Estado, similar a la provincia, con altos niveles de autonomía. Este tipo de organización se utiliza preferentemente en estados federales o en regiones con una identidad particular al resto de la nación como forma de evitar su independencia.
Muchas de estas repúblicas fueron establecidas durante la época soviética como Repúblicas Autónomas Socialistas Soviéticas (RASS).
En América se dio un caso único, la Confederación Perú-Boliviana se dividía en tres Estado autónomos, pero según la constitución peruano-boliviana, estos Estados eran Repúblicas autónomas e incluso el término «República» fue incluido como el segundo nombre oficial de cada uno de los tres Estados.[1]
En Moldavia hay dos unidades territoriales autónomas: Gagauzia y Transnistria (territorio controlado por Transnistria, una república de facto independiente).