Los Valinhos corresponden a los terrenos que los tres pastorcitos de Fátima recorrían desde sus casas en la aldea de Aljustrel hasta la Cova da Iria (Cueva de Iria) para el pastoreo de sus rebaños. Fue en este lugar donde sucedieron dos de las apariciones del Ángel de la Paz (o Ángel de Portugal) en 1916 y la cuarta aparición de Nuestra Señora de Fátima el 19 de agosto de 1917.
Actualmente, los Valinhos son visitados por miles de peregrinos nacionales y extranjeros que recorren el Vía Crucis hasta el Calvario Húngaro, visitan la Capilla de San Esteban de Hungría y de allí pasan a visitar la casa de Lucía y la casa de los santos Francisco y Jacinta Marto en la aldea de Aljustrel.
En los Valinhos, las esculturas de las estaciones del Vía Crúcis, del Ángel de la Paz y de la Virgen María son todas de la autoría de Maria Amélia Carvalheira da Silva.